Una alimentación saludable no es suficiente para cuando se tiene una insuficiencia renal o una enfermedad renal crónica.
En la insuficiencia renal o enfermedad renal crónica (ERC) la alimentación se tiene que adaptar a cada caso, ya que no todas las personas que padecen esta enfermedad tienen por qué tener las mismas condiciones ni los mismos resultados en las análisis de sangre. Para poder personalizar la pauta de alimentación es importante tener un análisis sangre y de orina de 24h reciente.
Por lo general, en insuficiencia renal conviene limitar el consumo de 3 minerales: fósforo, sodio y potasio. Aunque en algunos casos menos comunes habrá que hacer justo lo contrario, si en las análisis de sangre aparece alguno de estos minerales bajos, habrá que aumentar su consumo.
A continuación, todas las recomendaciones sobre alimentación que te doy son generales, principalmente adaptadas a disminuir fósforo, sodio y potasio en la alimentación, ya que es lo más habitual en dicha enfermedad. Estos tres minerales, en caso de consumirlos en gran cantidad, el riñón no podrá excretarlos y se acumularán en la sangre, pudiendo causar a su vez otros daños en la salud de la persona.
Lo primero y más sencillo es reducir, hasta llegar a quitar, la sal que le añades a tus comidas. También se debe aprender a leer el etiquetado de los productos para identificar si tienen sal añadida. Lo cual puedes ver en los ingredientes.
Alimentos que puedes consumir con insuficiencia renal o enfermedad renal crónica:
- Los cereales y sus productos (pasta, panes, harinas…) deberán consumirse en su versión refinada, es decir, las harinas blancas. Evitar el consumo de cereales, harinas y productos integrales, ya que tienen mayor cantidad de fósforo y potasio.
- Los lácteos, dependiendo de cada caso, se podrán consumir 1-2 veces al día, siempre que sea posible consumir los semidesnatados.
- En cuanto a las frutas y verduras, puedes descargarte de forma gratuita en mi web el e-book donde tienes una guía con todas las frutas y verduras que puedes consumir, su frecuencia, y las que conviene evitar.
- En el caso de las legumbres es recomendable consumir las de bote o las congeladas, ya que gracias al proceso de cocinado han perdido minerales. Si prefieres consumir las legumbres secas y hacerle tú el proceso de remojo, tendrás que hacer un doble remojo, de al menos 3-4 horas y siempre tirando el agua. Después las podrás cocinar, o también puedes congelarlas para posteriormente usarlas en alguna receta. En caso de congelarlas, tendrás que ponerlas en agua en el proceso de descongelación, y como siempre, tirar el agua.
- Alimentos que sí están restringidos: chocolate y frutos secos.
Desde que sepas que padeces una enfermedad renal crónica puedes poner en prácticas estas recomendaciones, aunque por supuesto, lo mejor siempre será conocer tu caso en profundidad y adaptarlo según los resultado de tus análisis de sangre y orina.